El 15 de diciembre de 1976 se hizo en España un Referéndum para que los españoles opinaran y votaran por primera vez en Democracia débil todavía, si estaba o no a favor de que se enterrara más o menos al Franquismo y se elaborara una nueva Constitución y se avanzara hacia una España democrática.
Se vota por todos el aprobar o no la Ley de Reforma Política. Y las calles se llenaron de pintadas, de octavillas y de pegatinas a favor y en contra de aquella aprobación.
Del éxito de esta consulta a todos los españoles o del fracaso si saliá NO o si los españoles íbamos pocos a votar, dependía en gran medida el futuro de la democracia española, amenazada por la presión de sectores militares y nostálgicos del franquismo y el rechazo de una oposición todavía clandestina.Y todo ello además en un creciente clima de violencia y de acciones terroristas en crecimiento tanto en número como en gravedad.
Por ello, el gobierno de Adolfo Suárez se volcó en una campaña propagandística dirigida a promover la participación y el apoyo a su iniciativa, utilizando incluso recursos próximos de la contra propaganda.
Aquí arriba podemos ver unas octavillas de la Falange, pidiendo que no se acudiera a votar, o de hacerlo para votar NO a la Reforma política. Y abajo parte de las octavillas que solicitaban todo lo contrario, acudir a votar y hacerlo con el SI.
Con una participación del 77,72% el voto al SI fue del 97,36%. Ya no quedaba duda, era inevitable que saliera que SI pues era inevitable también que España se encaminara democráticamente hacia una nueva realidad política.
Estas octavillas estuvieron en las calles y por eso las muestro aquí, en un lugar para dejar constancia de los gritos de calle, de los grafiti o de los impresos que se utilizan como GRITOS. Yo no tengo censura para mostrar lo que sucedió, sea del tipo que sea.
