Es posible que nadie se entere de las noticias, de los mensajes que nos manda el teléfono, pero si sale a la calle seguro que verá estos carteles en donde se informa de en qué lugar hay que tirar los lodos, qué viviendas están en peligro o ya han sido revisadas, qué coches han sido ya inspeccionados en busca de víctimas, etc.
La comunicación urbana es a veces imprescindible.